Cúrcuma: una especia que cura

Según un estudio presentado en una reunión sobre Biología Experimental en Washington, organizada por la Sociedad de Fisiología de Estados Unidos se reveló que la cúrcuma podría ser un agente preventivo o de reducción de los efectos de enfermedades neruodegenerativas e incurables, entre ellas, el mal de Alzheimer.
Esta especia de color amarillo intenso es de la familia del jengibre y proviene de la zona de Java, aunque se ha extendido a todos los países tropicales del Asia. En la cocina se utiliza la raíz generalmente hervida, seca y molida y es uno de los ingredientes del curry en polvo y de la salsa Worcestershire. También es un reemplazo económico del azafrán, por lo cual en castellano muchas veces se le ha llamado “azafrán árabe”
Los especialistas aseguran que esta especia activa las propiedades de una enzima que protege al cerebro de los factores oxidantes típicos de la edad avanzada.
También catedráticos del Instituto de Nutrición y la Tecnología de la Universidad de Granada sostienen en otra investigación que incorporar esta especia a nuestra dieta puede prevenir problemas cerebrales, infartos, arteriosclerosis y la enfermedad vascular periférica.
Todas estas bondades se suman a sus ya conocidos efectos antiinflamatorios y anticancerígenos. Viejas recetas de la botica de la abuela indican que para desaparecer granitos u otras afecciones cutáneas basta con mezclar una cucharadita de polvo de cúrcuma con un poco de agua y aplicar en la zona afectada tres veces al día. Asimismo para combatir gripes y resfrío acudir a la preparación de una infusión de media cucharadita de cúrcuma en una taza de agua hirviendo. Dejar reposar y Salud!